El libro enfadado. ¡Tan enfadado que está rojo! Pero, afortunadamente, la ira se le va pasando y el libro se va tranquilizando poco a poco. ¡Uf, ya está! ¡El libro ya no está enfadado!
Por el momento el favorito de mi hija, me encanta aplicar las actividades de conteo, cosquillas, secretos, besos y abrazos que menciona el libro para que se ponga feliz